Después de mi visita a Bilbao, no podía dejar de pasar por San Sebastián, también conocida como Donostia en euskera. Este destino, famoso por su belleza natural y cultural, me dejó completamente maravillada. Quiero compartir con ustedes algunos de los lugares que visité y recomendaría a cualquiera que tenga la oportunidad de explorar esta encantadora ciudad costera.

Playa de Donosti – San Sebastián

Mi primera parada fue, por supuesto, la emblemática Playa de la Concha. La playa de Donosti es una de las más famosas de Europa, y no es difícil ver por qué. Su forma de concha, rodeada por un hermoso paseo marítimo y flanqueada por montañas, ofrece un paisaje verdaderamente impresionante. Pasé una tarde maravillosa paseando por la arena, disfrutando del sol y la brisa marina. La playa está perfectamente cuidada, y el agua cristalina invita a un chapuzón. Sin duda, es un lugar ideal para relajarse y desconectar del bullicio de la vida diaria.

El San Sebastián de Chillida

No se puede hablar de San Sebastián sin mencionar la influencia del célebre escultor Eduardo Chillida. La ciudad alberga varias de sus obras, pero una de las más impresionantes es el «Peine del Viento«. Este conjunto escultórico se encuentra en el extremo de la bahía, junto a la playa de Ondarreta. Las enormes esculturas de acero se integran perfectamente con el entorno natural, creando una combinación única de arte y naturaleza. A pesar de que el acceso directo al Peine del Viento estaba cerrado por razones de seguridad debido al desprendimiento de rocas, la vista desde la distancia sigue siendo espectacular. La fuerza del mar chocando contra las esculturas es una imagen poderosa y evocadora que permanece en la memoria.

Bonitas vistas desde Monte Igueldo

Uno de los momentos más memorables de mi visita fue subir al Monte Igueldo. Las vistas panorámicas desde la cima son absolutamente impresionantes. Puedes ver toda la bahía de La Concha, la ciudad y más allá, hasta donde el mar se encuentra con el cielo. Es el lugar perfecto para tomar fotos que capturen la esencia de San Sebastián. Subí al monte utilizando el funicular de Igeldo, que tiene más de 100 años y añade un toque de encanto nostálgico a la experiencia. El trayecto en el funicular es corto pero muy pintoresco, y una vez arriba, hay un pequeño parque de atracciones que es perfecto para pasar un rato divertido.

Funicular de Igeldo con más de 100 años

El funicular de Igeldo es una atracción en sí misma. Con más de un siglo de historia, este medio de transporte ha estado llevando a locales y turistas a la cima del monte desde 1912. Subir en este funicular es como hacer un viaje al pasado, con sus vagones antiguos y el lento pero constante ascenso que ofrece unas vistas cada vez más amplias de la ciudad y el mar. Es una experiencia que no se puede perder, no solo por las vistas desde arriba, sino también por la sensación de estar participando en una tradición centenaria de San Sebastián.

San Sebastián es muy bonito, seguramente volveré algún día

San Sebastián es, sin lugar a dudas, una de las ciudades más hermosas que he visitado. Su combinación de playas espectaculares, arte, historia y paisajes naturales la convierte en un destino que tiene algo para todos. Ya sea paseando por la Playa de la Concha, admirando las obras de Chillida, disfrutando de las vistas desde el Monte Igueldo o simplemente perdiéndose en las calles del casco antiguo, cada rincón de San Sebastián tiene su propio encanto y su propia historia que contar.

Recuerdo mi tiempo en San Sebastián con gran cariño y ya estoy planeando una futura visita. Hay tanto que ver y hacer que unos pocos días no son suficientes para capturar toda la magia de esta ciudad. Sin embargo, los lugares que he mencionado son sin duda alguna esenciales para cualquier itinerario y estoy segura de que cualquiera que los visite quedará tan impresionado como yo.

En resumen, San Sebastián – Donostia es un destino que enamora a primera vista. Con su rica mezcla de cultura, naturaleza y historia, ofrece una experiencia que difícilmente se olvida. Estoy deseando volver y seguir descubriendo todo lo que esta maravillosa ciudad tiene para ofrecer. Si tienes la oportunidad de visitar, no lo dudes. San Sebastián te espera con los brazos abiertos y una multitud de experiencias inolvidables.

¡Nos vemos en el próximo post!